Sin mucho ¡Kiero más!

No tengo mucho.
Bajo la escalera del tejado
o subo de nuevo _no hay nada nuevo
alla abajo.
Sonriente me levanto al cielo
y a sorbos ricos tomo su suspiro
me acomodo en el asiento de la luna,
que desquiciada,
que lunática,
asientos de barro
y sin acero...
Un cuento que sigue su curso,
escupo a través de la ventana
del tiempo
se arrodilla el minuto que parece hora
e implora
que alcance a ser más que un tic-tac,
prendo la ducha y siento la rutina
cuchicheandome en el oido--
¡menos mal que tengo que esta sombra
siguiéndome a todos lados!
si pienso demasiado
¡que importa!
esta melodía me la exijo todos los días,
inconciente
es lo unico que no reflexiono,
llega y me toca,
me toca y te roza por lo menos....

Este no sera un día como cualquiera
tu no eres como el comun de todos,
nadie es igual al otro,
lo que abunda es la envidia...
lo que abunda es lo que nos distingue
pero el error es buscar como hacernos tan iguales,
y es que es imposible_
y es que es poco posible que yo baje de esta nube,
por mucho que todos me griten desde abajo
ya es muy tarde_
deja la ñiñeria y baja al cemento-concreto
masa acumulada de piedras y rocas incomodas-
yo no quiero eso
me-te-te-lo bien en la cabeza-
quiero prados y rieles bajo mis rodillas,
papeles irreales,
escribir sobre el cosmos
sin firmar leyes,
quiero una vida
distinta a la tuya y a la que hoy es la mía,
quiero
quiero
tantas cosas
y no me conformo con lo que poco tengo,
no es carpicho
son humildes sueños.:
como tu, el de él, el de ella
y el de todos nosotros.